El libro peludo de Noruega: un cancionero medieval envuelto en piel de foca

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Un cancionero del siglo XIII recientemente descubierto encuadernado en piel de foca podría ser el libro más antiguo de Noruega que se conserva. El “códice Hagenes”, como se lo conoce ahora, probablemente se elaboró ​​alrededor del año 1200 d.C. y se transmitió de generación en generación de una familia de agricultores noruegos. Este humilde tesoro encuadernado en cuero está causando un gran revuelo entre historiadores y entusiastas de los libros.

El códice en sí es pequeño y contiene ocho cantos litúrgicos latinos (himnos cantados durante los servicios religiosos cristianos) escritos en una notación musical distintiva. Uno de los himnos honra a María, mientras que otro celebra el Día de Todos los Santos, una fiesta solemne en honor a santos sin días de recuerdo individuales. Al libro le faltan varias páginas, pero según la tradición familiar, probablemente procede de una iglesia o monasterio.

Lo que hace que este manuscrito medieval sea verdaderamente único es su portada inusual. El códice consta de dos hojas dobles de pergamino encuadernadas en piel de foca, con un pelaje tenue aún adherido a la superficie. “Este libro parece increíblemente auténtico”, explica Åslaug Ommundsen, profesor de latín medieval en la Universidad de Bergen. “Es el tipo de cosa que un sacerdote o un cantor llevaría para usar en la iglesia”.

Chiara Palandri, conservadora de la Biblioteca Nacional de Noruega, añade que la naturaleza artesanal de la encuadernación, junto con la correa de cuero aparentemente local, posiblemente elaborada con piel de reno, apunta hacia un hábil artesano noruego que trabaja con materiales fácilmente disponibles.

Si bien la atadura con piel de foca es poco común en la Noruega medieval, no ha sido del todo desconocida. Estudios recientes sobre encuadernaciones de libros de los siglos XII y XIII en toda Europa revelan que los monjes cistercienses en Francia utilizaban ocasionalmente piel de foca para forrar libros. Estos “libros peludos” presentaban pieles de una variedad de especies de focas provenientes de una extensa red que se extendía desde Escandinavia hasta Groenlandia, destacando las fascinantes rutas comerciales globales de la época.

El códice de Hagenes, sin embargo, difiere de estos ejemplos continentales, sugiriendo que fue elaborado dentro de la propia Noruega.

Un examen más detallado mediante técnicas microscópicas ha confirmado la unión de la piel de foca y los científicos están planeando análisis adicionales. Esto ayudará a identificar el origen del pergamino y el cuero utilizados, lo que permitirá una datación más precisa de la creación del libro. Si estas pruebas confirman sus orígenes noruegos, el códice sería un testimonio singular de las prácticas de apuestas medievales tempranas que desaparecieron de otras partes de Europa.

El códice Hagenes ofrece una visión apasionante del pasado de Noruega. Su existencia plantea preguntas intrigantes sobre la artesanía y las tradiciones artísticas de la época, arrojando luz sobre cómo la fe y la vida cotidiana se entrelazaron durante la Edad Media.